Mermelada de fresa... o el desayuno de los campeones...

Esta receta, la tengo hecha desde hace mucho, claro está... pero creo que hoy es el día de subirla. Hoy, es mi primer día de mis vacaciones, y como siempre, las comienzo levantándome sobre nueve o diez, en vez de mis habituales seis y media de la mañana... Hoy me relamía especialmente, me apetecía hacerme una tostada con mi propia mermelada de fresa, que estaba esperándome pacientemente en la nevera... Un bocado, le he dado a la tostada... porque han tocado el timbre y sin recordar que debo poner mis tesoros a salvo, he ido presta a abrir... Cuando he vuelto, tres segundos después... mi querido cabroncete de cuatro patas y rabo, me ha felicitado por la mermelada, esta vez, no sólo se ha comido el "topping"... también se ha comido el pan. 

La receta es de Directo al paladar y no tiene ni punta de comparación con la mejor de las marcas o las ecológicas... probad en cuanto hallan de nuevo, es sencilla y deliciosa.

MERMELADA DE FRESA

Ingredientes: 

-750 g de fresas

- 1y 3/4 de tazas de azúcar

- 1 taza de agua

- el zumo de un limón

 ELABORACIÓN:

Se lavan las fresas y se les cortan los rabitos. Medio kilo de fresas es destinado a la licuadora junto con el zumo de limón y agua. Una vez hecho puré, se pone en una olla a fuego suave, dándole vueltas continuamente con una cuchara de madera y añadiéndole el azúcar.

El resto de las fresas las cortamos a pedazos, más o menos pequeños, según nos guste encontrar el tropezón , y se añade unos diez minutos después de haber comenzado la cocción. 

Se cocina aproximadamente entre media hora y tres cuartos, hasta que al levantar un poco de la mezcla con la cuchara y volverla a verter, las gotas caigan lentamente y tiendan a unirse.

Una vez conseguido, la incluimos en botes esterilizados y se deja en la nevera.