lunes, 25 de noviembre de 2013

Tagliatelle all'Alfredo

A quién no le gusta la pasta? a quién? venga que levante la mano... Lo veis? A nadie. Yo soy adicta a la pasta, literalmente, aunque por detrás de los huevos fritos con patatas, claro está. Esta es una receta sencilla, muy sabrosa y agradecida.
En mi casa, sólo se comía pasta si llevaba tomate. Desde que me emancipé, descubrí que eso es sólo la punta del iceberg... con aceite y ajo, nata, huevo, quesos... un sin fin de posibilidades que hace que mis papilas gustativas bailen la danza del vientre. Os dejo con la receta.

TAGLIATELLE ALL'ALFREDO
Ingredientes para cuatro personas:
-25 ml mantequilla
- 200 ml nata refrigerada
- 400 g de tagliatelle
- 85 g de grana padano rallado
- Un pellizco de nuez moscada recién rallada
- 225 g de guisantes frescos
- 175 g de jamón serrano en tiras
- Sal y pimienta

Elaboración:
Ponemos la mantequilla y 150 ml de la nata en un cazo grande y la llevamos a ebullición a fuego medio. Después lo cocemos a fuego lento durante minuto y medio o hasta que la salsa se haya espesado ligeramente.
Ponemos a cocer en una cazuela la pasta con un chorrito de aceite y sal, siguiendo los tiempos del fabricante. Cuando estén en su punto los escurrimos y los devolvemos a la cazuela añadiendo la salsa, removiendo a fuego muy lento, para que se impregne.
Añadimos el resto de la nata reservada, el queso rallado y la nuez moscada. Removemos y salpimentamos.
Servimos la pasta en los platos y le agregamos los guisantes y el jamón


sábado, 23 de noviembre de 2013

Nidos de patatas con huevo y chorizo

Cuando vi que Helena del Valle lanzaba una campaña solidaria para recetas de Navidad, junto con otras compañeras, no dudé ni un segundo en lanzarme. Llevo muuucho tiempo dándole vueltas y más vueltas. Ésta no es la única idea que me ronda la cabeza, pero sí la más sencilla. Qué hay más rico que unos huevos con patatas y chorizo? Posiblemente, pocas cosas, confesadlo. Pues he decidido coger esos tres ingredientes que son económicos y muy humildes y darles una vuelta de hoja. A ver, en vez de hacer las clásicas patatas, haremos unas patatas de palito muy finas con el rallador de zanahorias... y en medio colocaremos la yema del huevo, pero ésta, no estará frita... y qué habrá dentro de la yema de huevo? Chorizo...




Quería presentar una receta con ingredientes muy básicos, porque, no nos engañemos, la cosa está muy mal. Muy muy muy pero que muy mal. A mi alrededor, en mis allegados, flota un ambiente de disconformidad... de malestar... desilusión... y por mucho que trates de no verlo, está. Pero también conozco gente y no muy lejana, que lejos de ese "malestar", lo que no tienen es qué echarse a la boca. No, no es broma; no, no exagero. Así que... ahí queda mi humilde propuesta. Seguro que llegan más, ya lo veréis.

Helena, gracias por lanzar esta iniciativa.

NIDO DE PATATAS CON HUEVO Y CHORIZO
Ingredientes para una persona o plato de aperitivo
- 1 patata hermosa
- 1 huevo
- 2 chorizos pequeños y picantes
- Aceite de oliva
- Sal


Elaboración:
Lavamos la patata, la pelamos y con un cortador de zanahoria la cortamos a tiras finas y las dejamos en un bol con agua y sal al menos doce horas antes. Debemos cambiar dicha agua al menos una vez, para que pueda soltar la patata todo el almidón. Cogemos el chorizo, lo sacamos de la tripa y lo freimos hasta que quede tostadito; retiramos y lo dejamos escurrir.
En una sartén con abundante aceite caliente agregamos las patatas y las salamos. Cuando estén tostadas, las dejamos escurrir.
Ponemos el chorizo en papel film y le agregamos la yema de huevo; lo escaldamos en agua hirviendo, y lo servimos en medio.

miércoles, 20 de noviembre de 2013

Carxofes en salsa y hasta pronto

Hui fa un mes que ja no estas aci, fisicament, vull dir; perque jo se, que desde fa cinc anys no hi estaves sempre amarrada a aquell llit. Estaves en mi, en nosaltres, tal volta tractant de cuidar-nos. Possiblement, eixa força extra que reb quan crec que no puc més, me la fas aplegar tu.
Vull donar-te les gràcies perque crec, que mai ho he fet. Sóc qui sóc per tu. Tins els teus valors, perque m’els has inculcat.
Et trobe a faltar.

Així que te cuque el ull des d'ací i et pose un trocet d' aquella pel·lícula que sempre t'espantava perque David Bowie deixava entreveure massa les seues parts pudendes...



Hoy hace un mes que no estás aquí, fisicamente quiero decir; porque yo sé que desde hace cinco años, no estabas siempre atada a esa cama. Estabas conmigo, con nosotros, tal vez, tratando de cuidarnos. Posiblmente, esa fuerza extra que noto cuando no puedo más, me la haces llegar tú.
Quiero darte las gracias porque creo que no lo he hecho nunca. Soy quien soy por ti, tengo los valores que tengo, porque tú, me los has inculcado.
Te echo de menos






Allá donde estés, ahora eres libre, ahora estás recibiendo el descanso que tanto merecías. Aquí dejo uno de los platos, de la mejor mujer que conozco. No es su mejor plato, pero sí es una pequeña proeza, ya que es la única manera en la que yo, como alcachofas. Prometo que probaré a cocinarla de otros modos, y así darle más oportunidades, pero de momento, esta receta, es sagrada en mi casa.



Alcachofas en salsa
Ingredientes para cuatro personas
  • 8 alcachofas
  • 2 patatas
  • 2 tomates maduros
  • 1 cebolla
  • 2 vaso de caldo de carne
  • 1 vaso de vino blanco
  • 1 puñado de almendra picada.
  • 2 cucharadas soperas rasas de harina


Elaboración:
Se pelan y se cortan las alcachofas en cuartos. Se ralla el tomate y se pica fina la cebolla y se sofríe. Cuando vemos que el tomate empieza a tomar colar otro color y la cebolla está blandita, añadimos la harina y removemos enérgicamente. Inmediatamente añadimos el caldo y el vino. Agregamos las almendras, las patatas a pedazos y las alcachofas. Dejamos cocinar una media hora a fuego medio-alto, hasta que las patatas y las alcachofas estén cocidas y el caldo haya espesado.


lunes, 11 de noviembre de 2013

Costillas fritas en salsa y mirando atrás

Tengo la suerte de estar rodeada de muy buena gente, pero a parte de eso, gente apasionada como yo, al buen comer, y a la cocina casera. Yo aprendo imitando las delicias de otros, aprendo y mucho, espero que nadie se dé por ofendido. Luego siempre le doy mi toque personal. Dejé la casa de mis padres a los veintidós, con lo que llevo casi ocho años siendo independiente. He pasado de sólo hacer correctamente una tortilla francesa a realizar curries hindúes con mucho acierto. Cómo se consigue esto? Con tesón, con esfuerzo, con mucho ánimo, con ganas de aprender esta maravillosa alquimia, que es la cocina. Con el paso de los años he probado alimentos que jamás habría pensado, como por ejemplo la calabaza; he guisado cosas que ni mi abuela y madre jamás hacían como la fabada; me he dejado contagiar por la forma de cocinar de mis tías, y la comida extremeña, sangre, que llevo dentro de mí; y ahora, trato de aprender a cocinar cosas típicas de la zona de mi pareja. Por qué? Porque pienso que la cocina es una forma de demostrar amor a los nuestros, amor hacia nuestras raíces y amor a nosotros mismos. Hay quien dice que comemos por necesidad; yo no, yo como por placer y trato de hacer del plato más humilde un auténtico festín, que no están las cosas ni para despilfarrar, ni para tirar cohetes, así que, por lo menos, disfrutemos juntos de una buena comida, no? Disfrutemos de las cosas sencillas, de esas que de momento, sí que podemos disponer.

Esta receta, me la pasó Ana Guillén, mi compi de mi lugar de trabajo. Decir que son deliciosas, es poco. En pocos meses, las he hecho tres veces, porque son fáciles, sabrosas y rápidas. Yo la he adaptado un poco a mi gusto, así que, podéis probarlas a hacerlas tal cual, o darles vuestro toque!


COSTILLAS FRITAS EN SALSA
Ingredientes para 2 personas:
  • Costillas para asar para dos personas
  • 1 cebolla grande
  • Aceite de oliva
  • Pimentón ahumado
  • Dos cucharadas de salsa de soja
  • Sal

Elaboración
Dejamos macerando las costillas un par de horas con el aceite de oliva y el pimentón. Las cortaremos individuales y las embadurnaremos generosamente. En una sartén alta, con abundante aceite de oliva las freiremos hasta que estén tostaditas. En el mismo aceite incorporaremos la cebolla cortada en aros entre medio dedo y un dedo de grosor. Pochamos bien la cebolla y cuando ya esté blandita y tostada volveremos a reincorporar las costillas con las cucharadas de salsa de soja y lo dejamos a fuego bajo unos cinco minutos, para que se mezclen los sabores.



viernes, 8 de noviembre de 2013

Tarta de queso y calabaza o seguimos reconfortandonos a nosotros mismos

No es una idea original, sin duda, ya que la sustraí de Directo al Paladar, la vi hace una semana o dos y pensaba modificarla, pero lo he hecho en muy poco, por dos motivos; el primero, porque me parece casi perfecta tal y como está y el segundo, porque tal y como está mi estado de ánimo, es casi un milagro que me haya puesto a cocinar un postre… un auténtico milagro. Milagro, como lo fue esta tarta, que os aseguro, que a mí me puso unas cuantas tiritas en el alma, ya que dio lugar a una tarde muy agradable con los míos. Esta deliciosa tarta, impregnó la casa de un aroma dulce que nos invitó a hacer té y sacar el Scrable de su caja, que ya tenía polvo… a que mi pareja me diera una soberana paliza, para variar, y a pasar una tarde muy agradable con mi hermana y cuñado.
Debo de reconocer que me encanta el otoño, sus colores, la llegada del frío, y desde el año pasado, la llegada de buenas calabazas. Jamás había probado una calabaza hasta que estuve en Valencia hace cosa de dos años, y me dijeron que allí asadas con azúcar y canela eran un auténtico manjar. Tenían razón. Así que yo, cada vez las voy introduciendo más en mi dieta, ya sea en recetas saladas o dulces.



TARTA DE QUESO Y CALABAZA
  • 3 Huevos camperos
  • 200 g de puré de calabaza
  • 125 g queso de untar
  • 1 yogur griego edulcorado
  • Medio paquete de galletas maría
  • 50 g Mantequilla derretida aproximadamente
  • 120 g de azúcar moreno
  • 1 cucharita de café de canela en polvo
  • ½ cucharita de café de jengibre en polvo
  • ½ cucharita de café de nuez moscada
  • ½ cucharita de café clavo



Elaboración:
Sacamos los huevos de la nevera.
Metemos las galletas en una bolsa de congelado con el cierre y lo golpeamos hasta que queden muy finas. Lo ponemos en el molde y lo rociamos con la mantequilla derretida y aplastamos bien con un tenedor.
En una batidora el queso, el yogur y el azúcar y lo batimos con las varillas. Agregamos las especias y los huevos y seguimos batiendo. Por último, incorporamos el puré de calabaza. Cuando la mezcla esté homogénea, lo vertemos sobre las galletas y lo ponemos al horno a 180º , previamente precalentado unos 40 minutos o hasta que esté cuajado.

Nota: el día que lo comimos recién hecho, estaba delicioso, pero he de decir que al día siguiente, frío, de la nevera aún más.

Nota 2: el puré de calabaza debería de conseguirse de asarla, pero en mi caso, la hice al vapor, y quedó estupenda.